Aprende a ser abeja

En la pasada edición del festival gratuito «Sosteniblemente«, organizado por la Asociación Transitando y que tuvo lugar en La Casa Encendida en Madrid, Abejas en la Ciudad estuvimos presentes con un programa doble: una charla a cargo del apicultor del proyecto, Rubén Briongos, y un taller dirigido a niños y niñas de entre 4 y 8 años de edad.

Al taller lo llamamos Aprende a ser abeja: Taller de iniciación al mundo de las abejas y al «Club de Abejeros«, porque queríamos que todos los asistentes al taller experimentaran en primera persona lo que significa ser una abeja, de forma activa y participativa. Rubén les explicó desde qué es una abeja, los tipos de abejas sociales que forman la colmena y su función, la partes del cuerpo que tiene cada una, dónde viven y quién cuida de ellas, hasta el proceso de polinización tan importante que llevan a cabo para que todos podamos contar con los alimentos de los que nos alimentamos.

Llevamos a cabo varias actividades con los niños. Les dimos a elegir entre pintar su propia abeja o construir un puzzle ofreciéndoles las diferentes piezas que, juntas y combinadas, daban lugar a una abeja. Pintaron las abejas en una pieza de cartulina con forma de hexágono y en el caso de haber elegido construir el puzzle, las piezas se pegaron posteriormente en cartulinas con esa misma forma.

Una vez que cada uno terminó su abeja, unieron cada hexágono que representaba una celda de colmena, dando lugar a una colmena construida entre todos.

Una de las actividades que más conjugó juego y aprendizaje, y que con más entusiasmo siguieron, fue la de la polinización. Los futuros abejeros jugaron a ser abejas, contando con pequeñas antenas en sus dedos y pintura en las manos y, gracias a pipetas y pequeñas pinzas, polinizaron diferentes tipos de flores a la vez que llevaban a la colmena polen y nectar para alimentar a sus crías y fabricar miel.

Les explicamos durante todo el proceso qué significa polinizar, el tipo de flores a las que suelen visitar las abejas, la importancia de parar en diferentes flores en un mismo viaje y cómo se fabrica la miel.

Todos vieron y tocaron algunas de las herramientas que usa un apicultor, como un ahumador, guantes o una careta de protección.

Al finalizar el taller, cada uno de los participantes recibió un parche que les acredita como miembros del «Club de Abejeros».